Genes cornudos prt2

De rodillas junto a mi hijo mientras aquellos machos se cogian nuestras mujeres.
Ambos de rodillas con nuestro pene enjaulado, no sabía si sentirme mal ya que no pude heredarle genes de macho alfa o un pene grande.


Ambos somos unos betas, quizá es nuestra raza de betas y este es nuestro lugar.


Por otro lado la vista de los macho tendría que ser inigualable, envidiable.
Tenian a nuestras mujeres en 4 y a punta de grito pidiendo más de su enorme verga mientras los mismos cornudos de sus novios de rodillas viendo tal escena.
En el momento de los machos presentes éramos sus esclavos, ellos nuestros amos y señores.


El macho alfa de mi hijo era incluso más humillador y ofensivo ya que era rival de mi hijo. 
El equipo del macho siempre aplastaba al equipo de mi hijo su novia se encontraba dentro de las porristas.
Casi siempre le encantaba que tuviera la camisa de mi hijo mientras se la cogia y a mi hijo le ponían la minifalda de porrista.
 No había forma de competir, ambos machos era evidente de su superioridad física.


Cómo ya no ocultabamos nada, muchas veces ya se quedaban en nuestra casa ambos machos, durmiendo con su respectiva hembra mientras los cornudos se iban al sillón.
Aquel día fue especial, pues los machos ordenaron que sus 4 putas deberíamos estarlos esperando de rodillas, betas con el pene enjaulados, todos con nuestra correa en el cuello atada a la puerta.
Simplemente a la espera de los amos...
Al abrir la puerta ahí nos estábamos, cómo 4 perras esperando a sus amos de rodillas y atadas.
Cada amo tomo a sus putitas y nos llevaron hasta la sala.
Nosotras a gatas siguiendo como unas putas obedientes.


Ellos se sentaron y se pusieron cómodos mientras nosotras quedamos entre sus largas piernas.
Era hora de mamar la verga de nuestros amos, complacer a nuestros machos.
Una escena digna de admiración, las 4 putas de rodillas cabezeando sobre esas grandes vergas, atragantandonos con nuestras propias babas.



Después nos hicieron ponerles el condón a nuestros amos y se venía la posición de 69 cornudo.
El primer plano de como esa verga enorme entra en el coño de tu mujer mientras ella aprieta o sujete tu pequeño pene enjaulado.


A mierda cogida nos indicaron sacarles el condón y entonces a pelo entraba esa enorme verga.
No pude aguantar más e incluso enjaulado descargue mi inútil semen.
Escuché - Este cornudo patético se corrió viendo como me cojo a su mujer.
Mientras seguía taladrando a mi mujer.
Abre la boca cornudo ordeno el otro amo.
Se estaba turnando entre la boca y el coño.
De pronto note como las bolas de mi macho se comenzaban a contraer y era que venía su descarga.
Se veni dentro de mi mujer pero eso no lo detuvo siguió cogiendo sin perder su erección mientras algunas gotas de semen calleron sobre mi cara.
A los minutos se escucho un grito de placer, supuse que el otro macho también se había corrido.
Era increíble, estos cabrones se están viniendo dentro de nuestras mujeres y no somos capaces de hacer algo.


Simplemente con nuestro pene enjaulando y un primer plano de la escena.
En total se vino 3 veces dentro de mi mujer hasta que se quedó sin energía y perdió la erección.
Limpiarme la verga cornudo - me ordeno.
Comence a mamar su verga hasta dejarla limpiecita.
Después el otro macho se llevó a mi hijo y su novia al su cuarto y ya no supe más que paso entre ellos.
Nosotros también nos fuimos a la habitación pero a dormir.
Nuestro macho alfa en el medio y nosotras a cada lado.
Toda esta misma práctica se nos volvió rutina por al menos 1 vez a la semana.


Lo inevitable iba a pasar poco a poco comence a notar las tetas de mi mujer un poco más grandes al igual que las de la novia de mi hijo, nuestras mujeres estaban con caderas un poco más esanchadas y no había llegado la regla.
Dos pruebas de embarazo positivas confirmo toda sospecha.
Nuestro machos habían preñado a nuestras mujeres. Nuestras mujeres iban a reproducir los genes de macho alfa de aquellos dos machos.