
Todo comenzó por accidente, quizá fue suerte o una maldición. Una tarde en el cuál vino a salir una lluvia de repente, una tía recogió muy deprisa su ropa así como la ropa de la familia que estaba en el tendedero. Quizá por las prisas revolvió toda la ropa y optó por echar toda la ropa en la cama en el cual dormía yo con 2 primos más. Es aquí donde dio pasó a todo. Una de las panties, de color rojo de tela suave, con un detalle en la parte frontal de una mariposa. Quedó en un rincón del colchón.

Ahí surgió la pregunta, ¿Digo lo que he encontrado o no digo nada?. Y algo me dijo que no dijera nada. Así que espere unos días por si acaso. Pero no hubo indicios de que mi tía buscará su prenda. Por lo que pasando unos días la agarré y la escondí. Poco a poco fui descubriendo lo que podría hacer con esa prenda. Pasó el tiempo y un día por mala suerte mi prima mayor encontró esa prenda la había puesto en un envoltorio de papitas. Bueno, valió queso. Mi tía nos reunió y preguntó ¿quién había sido el que le había robado la prenda? Pues ya se imaginarán, quien dice que fue el. Nadie. Ahí quedo todo. Esa misma prenda mi tía se la dio a mi prima mayor. Ella la empezó a usar, pero yo seguí tomando esa prenda pero por unos instantes y la devolvía nuevamente a su lugar. Hasta que por tanto uso por parte de mi prima mayor, se rompió y ya la echaron a la basura. Ya ni ganas hubo de robarla nuevamente. Hasta aquí los inicios.

0 comentarios - Fetiche, inicios.