Buenos noches a todos, volvimos para contar esta pequeña experienia que se suma a las muchisimas que tenemos. El relato esta un poco exagerado para hacerlo mas vistoso pero asi fue como sucedio.
Muchas personas creen que lo peor que te puede pasar es que tú esposa te engañe con tu mejor amigo, pero nada más alejado de la realidad, lo peor que te puede pasar es que ella te engañe con tu peor enemigo. Para los que no nos conocen nosotros somos una pareja cuckold desde hace mucho tiempo, tenemos post y relatos para que los que nos quieran ver. Lo que les voy a contar paso hace algún tiempo atrás, veniamos con mucho morbo por qué se la coja un hincha de Boca (ambos somos fervientes hinchas de River) e hicimos una convocatoria abierta por Poronga! y otras páginas más, todas las propuestas que nos llegaron no nos llegaron a conocer hasta que llegó Gastón.
Gastón nos habló por P! Era un morocho de unos 45 años, tatuajes y pinta de barra brava, además de que tenía una pija muy grande y gorda (20*7), las favoritas de mi mujer, estuvimos hablando un tiempo y después de aceptar nuestras condiciones nos vimos en un bar. Para recordarles nosotros somos jóvenes, bien blanquitos, lindos de cara y un poco gorditos, de buena posición económica y estudiantes universitarios. Cómo parte del morbo mi mujer estaba vestida con una casaca de River y un pantalón de jean, abajo de eso tenía una hermosa lencería blanca y roja muy delicada.
Cuando lo vimos llegar nos preguntamos en qué nos habíamos metido, pero ya era tarde, el era todo lo que decían las fotos, un tipo tosco, con cara de pocos amigos y una actitud sobradora. Cómo le pedimos trajo puesta su casaca de Boca y nos saludo, le dió un beso en la mano a ella clavándole la vista en el escote, tomamos algo en una mesa y empezamos a hablar. Rápidamente nos dimos cuenta que era todo lo contrario a nosotros, no solo era un bostero empedernido sino que además su visión política era todo lo contrario a la nuestra, hasta llegó a decirme que no podía creer que quiera compartir a mi mujer, que el nunca haría eso, que el se las cogida a todas, y todas esas cosas de macho.
Que sea tan diferente a nosotros nos calentó mucho, así que le dimos el visto bueno y le preguntamos si quería ir a un lugar más privada.
-Dale, pero mira que yo no pago nada.
Nos dijo, cosa que a mí me re calienta, pague las birras que nos tomamos y nos subimos a nuestro auto rumbo a un telo, mientras manejaba me criticaba mi forma de manejar, diciendo que era como una nena y que iba muy lento, que ya quería llegar y comerse a mi mujercita. Alfin llegamos al telo y lo primero que hizo fue avalanzarse sobre ella, se hundió en su escote y le manoseaba el culo por sobre el pantalón y le empezó a dar besos por todo el cuello, ella estaba como loca recibiendo esos besos y esa manoseada de orto. Le encanta que un macho de verdad la domine.
Le fue desabrochando el pantalón y e hizo que se lo saqué ella, mostrando el redondo culo de mi mujer, el lo empezó a nalguear hasta dejárselo rojo. El contraste que había entre su piel blanquita con la piel morocha de Gastón me encantaba, y su culo rojo recién nalgueado hacia resaltar el conjunto blanco y rojo que llevaba.
El se sentó al borde de la cama y la llamo como si fuera una perra, ella se acercó caminando en cuatro patas y la hizo desabrocharle el pantalón para sacar su pija, ella apenas la vio empezó a chupársela como una loca, hasta ese entonces yo no dije ni una palabra, de echo era como si no estuviera ahí, ellos me ignoraban hasta que el dijo.
-Sentate en la esquina y aprende cornudito, te la voy a dejar toda rota a la gallinita.
La hizo pararse y la abrazo de atrás dándole más besos y restregandole la pija en el culo, la apretaba las tetas y le manoseaba la concha, hasta que la tiró en la cama y se empezó a sacar la ropa dejandose solo su casaca.
-Que linda gallinita me voy a coger -me dijo.
Y acto seguido puso la punta de su pija bien dura en la entrada de la conchita de mi mujer y empezó a empujar, mi mujer boca arriba gemia, gemía y gemía, le estaba entrando toda la pija de ese bostero.
-Veni mira como entra, mira como me cojo a tu mujer gallina puta.
Se la metió hasta al fondo y mi mujer solo lo aceptaba, estaba siento cogida por una pija enorme y a ella le encantaba. Acabo a los gritos cuando llegó al fondo y siguió acabando cada vez que el se la cogia con fuerza. Esa noche se la cogio como quiso, la uso como la puta que es, y siempre me tiraba un insulto haciéndome ver cómo menos hombre y como un gallina de mierda. El la puso en cuatro y mientras se la cogia le empezaba a meter los dedos en el culo, se lo estaba dilatado y ella estaba feliz, me dijo
-Pedi un lubricante cornudo, que hoy Boca le rompe el culo a River denuevo.
Llame a la recepción y en menos de 5 minutos ya tenía el lubricante, se lo dí y enseguida le empezó a embadurnar todo el orto con ese líquido, ella estaba encantada por recibir esa pija y súper dispuesta a que le rompan el orto lo movía despacio como provocandolo. Cuando se la empezó a meter mi mujer se quejaba era gruesa y ella no estaba acostumbrada, pero una vez que paso la cabeza se relajo y al cabo de unos minutos el bostero se la estaba culiando.
-Mira como este negro de mierda se coje a tu princesa, mira como este bostero se coje a tu gallinita!
Me dijo cagandose de risa, el lo estaba disfrutando más que nosotros, se la cogio por el orto un buen rato hasta que por fin estaba por acabar, la hizo arrodillarse y se empezó a pasear en su cara, ella abría su boquita esperando su premio y así fue, el le lleno la carita de leche, toda la carita de inocente de mi mujer completamente enlechada por un bostero. Cuando acabo se relajo todo el ambiente, mi mujer con toda la cara enchastrada me pidió algo para limpiarse a lo que el no tuvo mejor idea que seguir humillandome y le saco la casaca de River y le limpio la carita con eso, la hizo un bollo y me la tiró a mi donde yo estaba sentado. Yo estaba completamente humillado, ella totalmente cogida, y el bostero totalmente satisfecho.
Muchas personas creen que lo peor que te puede pasar es que tú esposa te engañe con tu mejor amigo, pero nada más alejado de la realidad, lo peor que te puede pasar es que ella te engañe con tu peor enemigo. Para los que no nos conocen nosotros somos una pareja cuckold desde hace mucho tiempo, tenemos post y relatos para que los que nos quieran ver. Lo que les voy a contar paso hace algún tiempo atrás, veniamos con mucho morbo por qué se la coja un hincha de Boca (ambos somos fervientes hinchas de River) e hicimos una convocatoria abierta por Poronga! y otras páginas más, todas las propuestas que nos llegaron no nos llegaron a conocer hasta que llegó Gastón.
Gastón nos habló por P! Era un morocho de unos 45 años, tatuajes y pinta de barra brava, además de que tenía una pija muy grande y gorda (20*7), las favoritas de mi mujer, estuvimos hablando un tiempo y después de aceptar nuestras condiciones nos vimos en un bar. Para recordarles nosotros somos jóvenes, bien blanquitos, lindos de cara y un poco gorditos, de buena posición económica y estudiantes universitarios. Cómo parte del morbo mi mujer estaba vestida con una casaca de River y un pantalón de jean, abajo de eso tenía una hermosa lencería blanca y roja muy delicada.
Cuando lo vimos llegar nos preguntamos en qué nos habíamos metido, pero ya era tarde, el era todo lo que decían las fotos, un tipo tosco, con cara de pocos amigos y una actitud sobradora. Cómo le pedimos trajo puesta su casaca de Boca y nos saludo, le dió un beso en la mano a ella clavándole la vista en el escote, tomamos algo en una mesa y empezamos a hablar. Rápidamente nos dimos cuenta que era todo lo contrario a nosotros, no solo era un bostero empedernido sino que además su visión política era todo lo contrario a la nuestra, hasta llegó a decirme que no podía creer que quiera compartir a mi mujer, que el nunca haría eso, que el se las cogida a todas, y todas esas cosas de macho.
Que sea tan diferente a nosotros nos calentó mucho, así que le dimos el visto bueno y le preguntamos si quería ir a un lugar más privada.
-Dale, pero mira que yo no pago nada.
Nos dijo, cosa que a mí me re calienta, pague las birras que nos tomamos y nos subimos a nuestro auto rumbo a un telo, mientras manejaba me criticaba mi forma de manejar, diciendo que era como una nena y que iba muy lento, que ya quería llegar y comerse a mi mujercita. Alfin llegamos al telo y lo primero que hizo fue avalanzarse sobre ella, se hundió en su escote y le manoseaba el culo por sobre el pantalón y le empezó a dar besos por todo el cuello, ella estaba como loca recibiendo esos besos y esa manoseada de orto. Le encanta que un macho de verdad la domine.
Le fue desabrochando el pantalón y e hizo que se lo saqué ella, mostrando el redondo culo de mi mujer, el lo empezó a nalguear hasta dejárselo rojo. El contraste que había entre su piel blanquita con la piel morocha de Gastón me encantaba, y su culo rojo recién nalgueado hacia resaltar el conjunto blanco y rojo que llevaba.
El se sentó al borde de la cama y la llamo como si fuera una perra, ella se acercó caminando en cuatro patas y la hizo desabrocharle el pantalón para sacar su pija, ella apenas la vio empezó a chupársela como una loca, hasta ese entonces yo no dije ni una palabra, de echo era como si no estuviera ahí, ellos me ignoraban hasta que el dijo.
-Sentate en la esquina y aprende cornudito, te la voy a dejar toda rota a la gallinita.
La hizo pararse y la abrazo de atrás dándole más besos y restregandole la pija en el culo, la apretaba las tetas y le manoseaba la concha, hasta que la tiró en la cama y se empezó a sacar la ropa dejandose solo su casaca.
-Que linda gallinita me voy a coger -me dijo.
Y acto seguido puso la punta de su pija bien dura en la entrada de la conchita de mi mujer y empezó a empujar, mi mujer boca arriba gemia, gemía y gemía, le estaba entrando toda la pija de ese bostero.
-Veni mira como entra, mira como me cojo a tu mujer gallina puta.
Se la metió hasta al fondo y mi mujer solo lo aceptaba, estaba siento cogida por una pija enorme y a ella le encantaba. Acabo a los gritos cuando llegó al fondo y siguió acabando cada vez que el se la cogia con fuerza. Esa noche se la cogio como quiso, la uso como la puta que es, y siempre me tiraba un insulto haciéndome ver cómo menos hombre y como un gallina de mierda. El la puso en cuatro y mientras se la cogia le empezaba a meter los dedos en el culo, se lo estaba dilatado y ella estaba feliz, me dijo
-Pedi un lubricante cornudo, que hoy Boca le rompe el culo a River denuevo.
Llame a la recepción y en menos de 5 minutos ya tenía el lubricante, se lo dí y enseguida le empezó a embadurnar todo el orto con ese líquido, ella estaba encantada por recibir esa pija y súper dispuesta a que le rompan el orto lo movía despacio como provocandolo. Cuando se la empezó a meter mi mujer se quejaba era gruesa y ella no estaba acostumbrada, pero una vez que paso la cabeza se relajo y al cabo de unos minutos el bostero se la estaba culiando.
-Mira como este negro de mierda se coje a tu princesa, mira como este bostero se coje a tu gallinita!
Me dijo cagandose de risa, el lo estaba disfrutando más que nosotros, se la cogio por el orto un buen rato hasta que por fin estaba por acabar, la hizo arrodillarse y se empezó a pasear en su cara, ella abría su boquita esperando su premio y así fue, el le lleno la carita de leche, toda la carita de inocente de mi mujer completamente enlechada por un bostero. Cuando acabo se relajo todo el ambiente, mi mujer con toda la cara enchastrada me pidió algo para limpiarse a lo que el no tuvo mejor idea que seguir humillandome y le saco la casaca de River y le limpio la carita con eso, la hizo un bollo y me la tiró a mi donde yo estaba sentado. Yo estaba completamente humillado, ella totalmente cogida, y el bostero totalmente satisfecho.
6 comentarios - Encontramos al Bostero!